Si bien el conocimiento profundo de su profesión es clave para triunfar como agente, también lo es poseer ciertas cualidades y valores. Alcanzar el éxito profesional es posible siempre y cuando se desarrollen habilidades y se tomen en cuenta diversos tipos de factores obligados y deseados.
Las personas que ejercen la profesión de intermediarios deben tener, por lo menos, sabiduría, temple e integridad para garantizar a sus clientes las soluciones que buscan. Aunado a esto, se necesita el suficiente carácter y persistencia para lograr todos los objetivos previamente establecidos.
Los agentes deben poseer una capacidad de juicio excepcional para juzgar lo mejor posible los acontecimientos y así poder guiar correctamente a sus clientes hacia la solución que le hace falta a sus vidas. Igualmente deben tener las credenciales suficientes para administrar los procesos adecuadamente, ofrecer resultados, generar confianza y ser competitivos.
Canalizar las energías, enfocarse en lo importante y darle su justa dimensión al dinero, impulsa a los intermediarios a mejorar profesionalmente , elevar su potencial y llegar a los más altos niveles.
¿Cuáles son las capacidades esenciales del agente?
- Ser un emprendedor con la capacidad para identificar oportunidades y explotarlas.
- Saber a la perfección cuál es su mercado natural y cuáles nichos puede explorar.
- Contar con un círculo íntimo de familiares y amigos que motiven y ayuden a superar dificultades.
- Tener una buena estabilidad financiera.
- Poseer el más alto grado académico posible y capacitarse constantemente.
- Resiliencia y capacidad de adaptación ante cualquier escenario y tipos de cliente.
Fuente: El Asegurador