¿Cómo va la aplicación de exámenes de agentes?

Mauricio G. Arredondo Fernández Cano / Director general, CEI

En marzo de 2020 se emitió la alerta sanitaria por la pandemia de covid-19. Debido a ella, cerró un sinfín de negocios e instituciones, pero el Centro de Evaluación para Intermediarios (CEI) no dejó de operar. Tras la petición de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF) aprobó que se mantuviera la operación del CEI, considerando su actividad como esencial, para mantener la aplicación de exámenes de acreditación de la capacidad técnica de los nuevos agentes y dar así continuidad a los servicios que ofrece el sector asegurador y afianzador. Además, a través de la Circular Modificatoria 4/20, la CNSF permitió que los agentes adelantaran sus exámenes mientras retomaba los trámites de refrendo.

Debido a ello, se observó un importante crecimiento en la programación de exámenes. En 2020 se programaron alrededor de 25 mil; en 2021, 31 mil, y en 2022, 33 mil. Si consideramos que una persona puede presentar más de una vez un examen o módulo, el número aproximado de personas atendidas en 2020 fue 16 mil; en 2021, 20 mil, y en 2022, 21 mil. Estos crecimientos se deben a dos aspectos:

• Una mayor solicitud de exámenes para nuevos agentes durante 2020 y 2021. El cre- cimiento promedio fue del 13%, ya que se atendieron 12.7 mil y 14.6 mil personas respectivamente. No obstante, en 2022 hubo una caída del 5.83% en el número de personas.
• Una mayor solicitud de exámenes para refrendo de cédulas durante 2021 y 2022. El crecimiento promedio fue del 33%, ya que se atendieron 6.9 mil y 8.7 mil personas respectivamente, lo cual se debió a que la CNSF publicó en enero de 2022 la Circular Modificatoria 1/22, que mencionaba la fecha límite para refrendar todas las cédulas vencidas duran- te la contingencia sanitaria.

Conforme fue pasando la pandemia, se observó una disminución de la proporción de solicitudes de exámenes para nuevos agentes y un aumento de los exámenes de refrendo, ya que antes de la crisis la relación era 73%-27% y en 2022 se tuvo una proporción promedio de 62%-38%.

En 2023, hasta octubre, se han programado 23 mil exámenes, lo que representa alrededor de 15 mil personas atendidas y una disminución del 17% en comparación con el mismo periodo de los dos años anteriores. Esto nos indica que la demanda de exámenes se está normalizando, ya que estamos regresando al promedio de exámenes solicitados antes de la contingencia sanitaria. Con respecto a los refrendos, la proporción de solicitudes de exámenes es de 80%-20%, lo cual se deriva de dos puntos:

• Durante 2021 y 2022 se incentivó a los agentes para que adelantaran el trámite de exámenes.
• En la Circular Modificatoria 1/23, publicada el 13 de febrero de 2023, se pospuso la fecha de vencimiento de cédulas al 15 de diciembre de este año. Esto implicó una caída del 60% en la solicitud de exámenes para refrendo hasta octubre de 2023, que se espera incremente durante este último bimestre.

Por otra parte, hasta octubre de 2023, la solicitud de exámenes para nuevos agentes tuvo un crecimiento del 17% en comparación con el mismo periodo de 2022, en el cual se presentó una caída de alrededor del 7%. Aproximadamente 8000 personas han acreditado sus exámenes, por lo que podrán continuar con el proceso de obtención de cédula, aunque se debe revisar cuántas personas concluyen el trámite o cuántas desertan, ya que existe una brecha importante. De acuerdo con las estimaciones del CEI, en promedio, 2000 personas acreditan sus exámenes, pero no obtienen su cédula.

El promedio de edad de las personas que realizan los exámenes para autorización en el CEI es de 39 años, lo cual se ha mantenido así durante los últimos años; sin embargo, los aspirantes de mayor edad son los de fianzas, que en promedio tienen 43 años. Esto es entendible si se considera que muchos agentes venden primero seguros y luego fianzas. En seguros, solo el 20% de los aspirantes tiene menos de 30 años. Aunque cada vez más gente joven se acerca a nuestra industria, todavía hace falta promover más la carrera de agente entre este sector de la población. El desarrollo de agentes es fundamental para el sector asegurador y afianzador, porque el número de estos es muy pequeño para atender a toda la población mexicana: hay 4 por cada 10 mil habitantes o alrededor de 11 por cada 10 mil personas económicamente activas. Para los aspirantes y agentes, la oportunidad de desarrollo es mayúscula, dado que la brecha de aseguramiento en México es importante. Para nuestro país, la existencia de una mayor cantidad de agentes interesados en proteger a todos los sectores de la sociedad a través de los seguros o las fianzas contribuirá a disminuir dicha brecha, ya que, en promedio, el 60% de las primas del sector asegurador se vende a través de agentes personas físicas o morales, por lo que, hasta la fecha, estos representan uno de los canales más importantes de colocación de seguros y fianzas, así que su incremento contribuye al crecimiento del sector asegurador y afianzador. Además, la participación de los agentes es fundamental para la penetración de mercados individuales y empresariales que requieren atención personalizada. Uno de los componentes de la inclusión financiera es fomentar el acceso a los servicios financieros y, en el mundo de los seguros y las fianzas, los agentes son un pilar muy importante para ello. Dado que son promotores de la cultura de la previsión, de la administración de riesgos y de la educación financiera, ellos son impulsores de la inclusión financiera y, por ende, de un mayor desarrollo económico.

*Nota publicada originalmente el 6 de diciembre en Revista Siniestro

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