En México uno de los principales retos que se tiene es la inclusión financiera, ya que es muy importante para el desarrollo económico y el bienestar de la sociedad, fomenta la justicia económica y crea mejores oportunidades para que las persona mejoren su nivel de vida.
Es necesario buscar una inclusión financiera completa, para ofrecer un conjunto integral de productos (servicios de pagos, crédito y seguros) de alta calidad a todas las personas para que pueden usarlos, a precios accesibles y con una distribución eficiente.
Para lograr una mayor inclusión financiera se deben considerar cuatro componentes:
Como se puede observar, uno de los componentes de la inclusión financiera es fomentar el acceso a los servicios financieros en donde, en el caso de seguros y fianzas, los agentes son un pilar muy importante, ya que son el principal medio de distribución al generar aproximadamente el 60% de la producción total de primas. Aunado a lo anterior, son promotores de la cultura de la previsión, de la administración de riesgos y de la educación financiera.
En este sentido, se puede decir que los agentes de seguros y fianzas son un elemento muy importante para poder lograr una mayor inclusión financiera en el país. Por lo tanto, deben generar credibilidad y acreditar que tienen los conocimientos para ofrecer el mejor producto para cubrir las necesidades de las personas y guiarlos en llevar a cabo una adecuada administración de riesgos.
Dado lo anterior, debe considerarse la importancia de la certificación, la cual permite fortalecer y consolidar el aprendizaje, generar conocimiento acerca de los temas que se deben atender para fortalecer el proceso de formación, y además posibilita:
Las pruebas de certificación son instrumentos estandarizados para personas que van a ingresar a laborar como intermediarios. Estas pruebas no se estandarizan por edad, estado socioeconómico u otro atributo poblacional; en cambio, se trata de instrumentos de evaluación que garanticen la calidad profesional de los sustentantes y que están en posibilidad de ejercer sus funciones laborales de manera competente. Por tanto, es importante garantizar que las pruebas se diseñen con características homogéneas, no solamente por su implicación a nivel nacional, sino por la exigencia de comparar el desempeño de los sustentantes y de las instituciones para las cuales laborarán.
Las ventajas de las pruebas estandarizadas reúnen generalmente aspectos positivos de la evaluación a nivel personal e institucional, desde los aspectos diagnósticos a los formativos, incidiendo en la mejora continua como apoyo a otros procesos dependiendo del proyecto (capacitación, certificación, producción de indicadores de desempeño, etc.); incluyen el cumplimiento de estándares de validez, objetividad y confiabilidad que, a su vez, están relacionado con la existencia de una escala para reportar los resultados de forma clara y pertinente para cada área profesional. Adicionalmente, se cuenta con las siguientes ventajas:
Para lograr lo anterior, la certificación se desarrolla de acuerdo con estándares internacionales para elaborar pruebas que presenten objetividad, pertinencia, confiabilidad y validez.
Cabe señalar que este tema no es exclusivo de los agentes de seguros y fianzas, ya que otros actores del Sistema Financiero también requieren una certificación, como son los asesores financieros y los promotores de casas de bolsa y de las administradoras de fondos de retiro. Además, a raíz de la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio con América del Norte se tomó el compromiso de homologar, evaluar y acreditar la educación superior con normas equivalentes en los tres países (México, Canadá y Estados Unidos), así como certificar el ejercicio profesional de algunas carreras que se acordaron en ese tratado, entre las que se encuentran la actuaría y la contaduría pública, entre otras; sin dejar de lado que las instituciones de educación superior han buscado los medios para asegurar la calidad de sus estudiantes. Por lo que día con día la certificación es un elemento importante para el desarrollo de los diferentes ámbitos laborales y para el desarrollo del país.
Mauricio Arredondo, director general del Centro de Evaluación para Intermediarios.