La actitud es de suma importancia para los agentes, pero por sí sola no garantiza el éxito. Los intermediarios deben poseer una buena cantidad de cualidades como un espíritu emprendedor, excelente discurso, buena impresión y solidaridad con sus clientes.
El emprendimiento es quizás una de las cualidades más importantes, porque los impulsa a ser mejores en todo momento, corregir errores, superar obstáculos e implementar constantemente nuevas estrategias que les permitan alcanzar sus objetivos.
Poseer un conocimiento del lenguaje y dominar el discurso le ayuda a los agentes a vender más, porque saben cómo reaccionar a determinadas circunstancias y expresarse de acuerdo a las características de cada cliente. Las redes sociales son el canal perfecto para explotar cualidades discursivas.
Si bien el dinero es importante y es una gran motivación, la solidaridad con los clientes tiene un papel crucial, porque ayuda a incrementar los ingresos gracias al compromiso irreductible con el futuro y bienestar de los consumidores, ofreciéndo soluciones a todas sus preocupaciones.
Causar una buena impresión es fundamental, pero ¿cómo saber si la impresión es la adecuada?
Pedir referencias a los clientes para saber si se respondieron sus expectativas es quizá la manera más fácil de saberlo, y si están contentos seguramente hablarán del trabajo del intermediario con familiares y amigos. En caso de que el cliente esté insatisfecho, el agente debe trabajar en esas áreas fallidas.
Pertenecer a organizaciones y asociaciones del gremio puede garantizar un crecimiento continuo, porque el agente estará rodeado de personas afines que lo ayudarán a alcanzar el éxito y mejorar constantemente.
Fuente: El Asegurador